Hoy toca decir adiós

Sé que te lloran las primaveras

Si mis ojos han hermanado con la lluvia

Ya no hay flor ninguna, tan siquiera alguna que de ti no hable el perfume que imitó

Y visten los cielos lutos que me acompañan y a sazón del viento musita sobre ti…nombres que he olvidado.

Se han abierto los caminos grises como un adiós, con sus guijarros, pequeñas tumbas .y tolvaneras que lejos bailan… girando este adiós.

Sé que te lloran las primaveras

Mira mis hojas de otoño,

Si los árboles me han tejido del follaje alfombras mustias que me separen del suelo,

¡No estoy muerto por Dios!

Ve los ríos que han cesado de murmullos varios, solo aguas serenas, solo estanques donde bebe herida la tarde…y yo.

Y del canto que antecede el estío: las avecillas han callado, un minuto de silencio y si es canto, un réquiem sobre mis manos estas que fueron tuyas; atavío de tu rostro, palpar de tus labios.

Y me han subido al cielo un ojo inmenso al final, y si le miro porque es bello… es nada en tu mirar.

Titilan luceros muchos, que te imitan, el iris tuyo, tus pupilas.

Me llega el aire preñado de ti, me rodea; pero es su abrazo un calco infame de tus brazos.

-¿Cuál es tu nombre?, lo olvidé.

Porque este no es mi primer adiós, quizás ni el último, es solo uno.

…adiós…

Da-Silva